Esta decisión sorprendió al mercado dado que los analistas esperaban que las mantuvieran quietas.
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) afirmó que la Electrificadora puso dos condiciones que impidieron la entrada de nuevos competidores.
El gremio de los importadores y exportadores señala que la primera consecuencia sería una desviación masiva al mercado informal, ya que una carga fiscal percibida del 11% actuaría como un fuerte desincentivo para la comercialización formal.